Hola a todos,
Hoy quiero acercaros al estudio de interiorismo Egue & Seta, de la mano de Daniel Pérez y Felipe Araujo que lideran un equipo multidisciplinar compuesto por “arquitectos, aparejadores, diseñadores gráficos, industriales, y por supuesto, de interiores” que diseñan “espacios siguiendo las pistas que nos da cada cliente, agregando creatividad, pasión y trabajo en equipo para transformar ideas en realidades”. Acompañadme en esta agradable charla sobre arte, interiorismo y la filosofía de este estudio, que no os dejará indiferente. ¡Y espero que os divirtáis leyendo, tanto como yo escuchando, las ingeniosas respuestas de este gran equipo!
Daniel Pérez y Felipe Araujo, fundadores de Egue & Seta
¿QUÉ HACE ESPECIAL VUESTRO TRABAJO?
La oportunidad de traducir estilos de vida, necesidades y hábitos prácticos muy concretos de los clientes al lenguaje de lo formal, lo construido y lo habitable. Si lo pensamos, la mayoría de las personas “proyectamos”, a lo largo de nuestra vida, cómo será(n) una o dos casas. Las propias. Los interioristas, en cambio, tenemos la oportunidad de imaginar a diario el escenario donde transcurrirá la vida, más íntima, de muchos de nuestros clientes. Pensamos en reuniones con amigos, claro, pero también en niños haciendo los deberes y padres cocinando y haciendo la colada. Incidir en esto es mucho más “especial” o trascendental, que la foto para la revista. Y en esto solemos concentrarnos.
UN MATERIAL, UNA FORMA Y UN COLOR QUE OS DEFINAN
Nos gustan muchos materiales, todas las formas, y los colores que se complementen entre sí. No nos sentimos “definidos” por un material un color o una forma, pues somos personas, en general mucho más complejas que eso. También, pues nuestros proyectos son el producto del trabajo de un despacho integrado por muchos profesionales con inquietudes, gustos y preferencias diversos. Tampoco creemos que sea necesario “casarse” con alguna opción, cuando los proveedores, el mercado y la tecnología, trabaja e invierte, precisamente para que tengamos un amplio abanico de materiales, formas y colores de dónde escoger. Todos ellos están ahí y funcionarán mejor o peor según el perfil del cliente, la tipología del espacio, el presupuesto y un largo etcétera. No es nuestra labor preferirlos, sino prescribir aquellos que representan mejor o articulan de manera más expedita la personalidad o necesidades del cliente. Debemos recordar que los diseñadores e interioristas no diseñamos una y otra vez “nuestra” casa o espacios que nos representen a nosotros mismos, sino que nuestra labor es poner nuestra experiencia al servicio de terceros. Son ellos y sus gustos los que deben verse plasmados en estos espacios.
SEGUIR LAS TENDENCIAS ¿SÍ O NO?
Si, pero no a rajatabla. Están ahí como guía y todos las necesitamos en un mundo multi céntrico en donde las innovaciones se suceden de forma cada vez más vertiginosa. Sin embargo, no solemos (y creemos que no debemos) interpretarlas como reglas o preceptos. De nuevo, las verdaderas directrices y “líneas rojas” de cada proyecto han de venir del cliente, sus necesidades, su presupuesto, el inmueble o el espacio, las condicionantes técnicas o la normativa. Seguir las denominadas “tendencias” podría llegar a tener un estatus de “regla” o ser realmente cruciales si estamos hablando de restauración o retail (aunque aún así lo dudamos), pero en el ámbito doméstico o de la vivienda particular, son enteramente opcionales Seguirlas o no, no determinan en ninguna medida la calidad del resultado o del proyecto. Las tendencias, por último, están también para ser cuestionadas o retadas, y en ese sentido también las apreciamos.
EL DISEÑO ESTÁ EN TODAS PARTES ¿UN ESPACIO QUE OS HAYA ENAMORADO DESDE EL PRIMER MOMENTO?
Es algo bastante emotivo, subjetivo y personal. Yo (Felipe), una vez leída la pregunta y repasando sitios, me pillé pensando en la Universidad Central de Venezuela (Caracas - Carlos Raúl Villanueva)... una ciudad universitaria que articulaba en su mejor momento y en el centro del valle tropical que sirve de asiento a la ciudad, una serie de edificios geniales que lograban una transición gradual y perfecta entre el exterior frondoso, húmedo y verde, y el interior de ladrillo, cristal, muro calado y hormigón. Describirlo en tan pocas líneas es muy complicado, pero si os interesa, googlearlo. Tanto el proyecto como su autor son muy interesantes y poco conocidos de este lado del charco.
UNA OBRA QUE NOS QUERÁIS COMENTAR
¿Obra de arte? ¿Obra literaria? ¿O una “obra” nuestra? ¿O os referís al proceso de la “obra” o la ejecución material de nuestros proyectos? Preferiría en cualquier caso comentar una obra de arte… Nuestras obras ya nos quitan bastante tiempo y aunque son todas muy necesarias, creo que no engañamos a nadie al decir que son en su mayoría un dolor de cabeza y como proceso, mucho menos romántico o bonito que el de una obra pictórica/escultórica… Hace un par de meses trajeron una exhibición itinerante de Op Art y cinetismo a la Pedrera de Barcelona que incluía varias piezas de Carlo Cruz Diez y Jesús Soto. ¿Los conocéis? Si no es así investigarlos un poquillo que valen mucho la pena, fusionan física (óptica) y arte de manera perfecta y en el espacio, con un resultado escenográfico tremendo que pienso puede aportar sino lecciones, al menos inspiración en nuestro quehacer diario.
Muchas gracias Egue & Seta, por compartir esta charla conmigo, al calor de un delicioso té,
Sebastian.